Cómo conservar el vino una vez abierto: claves y consejos
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Cómo conservar el vino una vez abierto: claves y consejos

Seguramente los expertos en vino conocerán sobradamente cómo conservar el vino abierto para que no pierda ni su esencia ni sus principales características. Pero si no atesoras tales saberes, es muy probable que te hayas cuestionado aquello de “el vino abierto, ¿cuánto dura?

Y aunque lo mejor y más recomendable es beberse la botella de vino en el momento de abrirla, esto no es siempre posible –no hay que beber por beber, sino disfrutarlo–; así que lo mejor es aprender cuánto dura un vino abierto y cómo conservarlo.

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Cuánto dura un vino abierto 

Lo primero que debemos tener en cuenta es que el vino mejora con los años, pero ¡ojo!, una vez abierto, comienza a deteriorarse por el contacto con el oxígeno, mientras que sus cualidades se van perdiendo en el proceso químico que se conoce como oxidación. Además, los cambios de temperatura extremos o la luz también son grandes enemigos para tener en cuenta.

Asimismo, el vino abierto en la nevera dura más o menos dependiendo de su tipología. Por ejemplo, los jóvenes, tánicos y blancos perduran más, al contrario que los espumosos, que son los más efímeros.

  • Vino espumoso: 1 día.
  • Vino blanco, rosado y tinto envejecido: 3 días
  • Vino tinto joven: 7 días

Por tanto, ¿cuánto dura un vino abierto con corcho? En este caso también dependerá del tipo de vino que sea y la cantidad que quede en la botella. Como media, no durará más de 2 o 3 días con el corcho; y si tenemos una bomba de vacío, quizás se mantenga un poco más.

Consejos para conservar el vino

Ante esta tesitura, si quieres saber cómo conservar el vino, ¡toma nota!

  • El vino abierto con corcho puede utilizar el mismo cierre para conservarlo. En caso de que dicho corcho esté deteriorado, otra alternativa sería un tapón especial para vino. Lo importante es que no entre aire para que no se estropee.
  • La bomba de vacío para vino es una opción perfecta porque elimina el aire del interior, sobre todo si la cantidad de vino no es mucha en comparación con el tamaño de la botella. De esta manera habrá mayores posibilidades de que entre más oxígeno, por lo que la bomba de vacío para vino permitirá cerrar herméticamente la botella y facilitará la conservación del caldo en buen estado.
  • El vino abierto en la nevera La oxigenación y el deterioro es más lento al estar frío. También puedes optar por mantenerlo en un lugar sin luz a un máximo de 22ºC. Para servirlo siempre debe estar entre dos o tres horas antes fuera de la nevera para que recupere su estado natural.
  • Utilizar una botella más pequeña. De esta manera, si está bien cerrada, tendrá menos oxigenación que una botella grande más vacía.
  • Evitar la luz del sol, algo de lo que no nos damos cuenta durante nuestras veladas veraniegas. Esto provoca un deterioro muy rápido del vino.
  • Siempre hay que mantenerlo en posición vertical y evitando que sufra movimientos bruscos. Al contrario que un vino cerrado, cuyo corcho debe estar en contacto con el vino, una vez abierto, lo mejor es mantenerlo de pie para que el oxígeno de dentro no esté en contacto con el vino.

¿Y si aún así el vino parece no estar bueno?

En definitiva, no hace falta ser un gran experto para saber que, si has seguido estos pasos y aun así tu vino tiene mal aroma y sabor, claramente está malo. En este caso lo mejor que puedes hacer es abrir otra botella de Protos y disfrutar de un buen vino. No te arrepentirás.

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